Desde la antigüedad se ha creído que el séptimo hijo o séptima hija de una serie de hermanos del mismo sexo posee poderes especiales y dones sobrenaturales. En algunos casos, ser séptimo hijo varón no representaba un don, sino una maldición: la de convertirse involuntariamente en lobo durante las noches de luna llena. Al mezclarse el mito del lobisón con la tradición de padrinazgo imperial, los presidentes argentinos se convirtieron en padrinos de todos los séptimos nacidos bajo su mandato, como si por medio del padrinazgo presidencial frenasen o contuviesen la metamorfosis del vástago en lobisón. Actualmente hay en Argentina un promedio de 150 bautismos presidenciales anuales. La ley del lobisón relata la historia olvidada de esta singular tradición que según una oscura leyenda venida del fondo de la historia, amenazan con convertirse en monstruos cuando asoma la luna llena.

Since ancient times it has been believed that the seventh son or seventh daughter of a series of same-sex siblings possesses special powers and supernatural gifts. In some cases, being the seventh male child did not represent a gift, but rather a curse: that of involuntarily turning into a wolf during the nights of the full moon. By mixing the myth of the wolf with the tradition of imperial patronage, the Argentine presidents became godfathers of all the seventh born under their mandate, as if through presidential patronage they slowed down or contained the metamorphosis of the offspring into a wolf. Currently in Argentina there are an average of 150 presidential baptisms annually. The law of the wolf tells the forgotten story of this unique tradition that, according to a dark legend from the depths of history, threatens to turn into monsters when the full moon rises.
Ficha técnica
Año: 2024
Duración: 90 minutos
Género: Documental 
Equipo técnico
Guión y Dirección: Gabriel Muro
Producción: Palta Films SRL
Producción ejecutiva: Nicolás Cobasky
Producción general: Hernán Figueroa - Nicolás Mikey
Dirección de fotografía y cámara: Nicolás Mikey
Coordinación de postproducción: Hernán Figueroa (EDA)
Montaje: Carlos Cambariere (EDA)
Música original: Carlos Cambariere
Postproducción de color:
Postproducción de sonido
Gráfica:

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